Juramento al futbol: Gabriel García Márquez

18 de Abril 2014.- A sus 87 años de edad, Gabriel García Márquez encontró la muerte en la Ciudad de México, siendo uno de los exponentes literarios más importantes de América Latina, respaldado por el Premio Nobel de Literatura en 1982, y con una ferviente afición por el futbol.

Los colores escogidos por el “Gabo” fueron el rojo y el blanco, los cuales pudo presenciar en su máxima expresión futbolística en la camiseta del Junior de Barranquilla, a quien pudo presenciar por vez primera en junio de 1950, escribiendo un “Juramento” que explica su primera impresión por la redonda.

“Y entonces resolví asistir al estadio. Como era un encuentro más sonado que todos los anteriores, tuve que irme temprano. Confieso que nunca en mi vida he llegado tan temprano a ninguna parte y que de ninguna tampoco he salido tan agotado”, fue la primera reacción que llevó a García Márquez a asistir al choque colombiano entre el Junior de Barranquilla y los Millonarios de Bogotá.

El primer objetivo de este juramento que exclamó Gabriel García Márquez en su primera asistencia al estadio fue la pérdida al ridículo, misma que al dejarla de lado lo adentraría en el mundo del hincha, al que terminó llegando al finalizar los 90 minutos.

“No creo haber perdido nada con este irrevocable ingreso que hoy hago –públicamente– a la santa hermandad de los hinchas”, con este fragmento se refleja la llegada de García Márquez al mundo del aliento sobre la popular, al salto desde las gradas y al hondeo de las banderas con el color del equipo.

De Heleno de Freitas se expresó como un extraordinario autor de novelas policiacas por su cálculo y reposados movimientos de investigador, de Haroldo Carijó lo comparó con Marcelino Meléndez y Pelayo por su facilidad de estar por todos lados y trabajando; esto si los jugadores del Junior hubieran sido escritores.

El “Gabo” también tuvo tiempo de hablar de una gloria histórica en su juramento al balompié, refiriéndose a Alfredo Di Stefano, quien jugase con los Millonarios de Bogotá de 1949 a 1953, como un sabedor de retórica, como lo único que sabía el astro argentino leyenda del Real Madrid.

“Lo único que deseo, ahora, es convertir a alguien…” la única misión de Gabriel García Márquez al término de su primer juego en el Estadio Municipal, y que al momento de publicar “El Juramento”, llevó a más de uno a la sagrada hermandad de los hinchas.

El amuleto colombiano: ‘Golty Macondo’

La Selección de Colombia regresará a una Copa del Mundo después de varios años de ausencia, y el escritor Gabriel García Márquez tuvo su contribución en este logro.

A finales del 2011 la FIFA le autorizó a la Federación Colombiana de Futbol el usar un balón especial en sus duelos como local del proceso mundialista que llevó por nombre “Golty Macondo”, haciendo referencia al pueblo de una de sus más famosas obras “Cien Años de Soledad”.

Sin duda, el amuleto surtió efecto, y Colombia se prepara para afrontar la justa amazónica donde esperan contar con el espíritu del “Gabo” apoyándolos para llegar lejos en el mismo. El Universal

EN CORTO

- Durante su paso por la casa de estudios bogotona, García Márquez destacó en varios deportes, llegando a ser capitán del equipo del Liceo Nacional de Zipaquirá en tres disciplinas, futbol, beisbol y atletismo.

- En la pasada clasificación de la CONMEBOL rumbo al Mundial de Brasil 2014, la Selección de Colombia sacó un balón conmemorativo denominado “Macondo”, el cual fue lanzado en honor a Gabriel García Márquez, llevando el nombre del pueblo ficticio de su opera prima, “Cien Años de Soledad”

- Gabriel García Márquez manifestó ser aficionado de los Pumas de la UNAM del futbol mexicano, recordando que tras huir de Colombia en 1981, pidió asilo en México.