Baja nivel del Río Bravo en Nuevo Laredo, pero esta garantizado abastecimiento de agua para la población

La Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) en Nuevo Laredo informó que en este momento el almacenaje en la presa La Amistad, ubicada al norte de Coahuila, es del 33 por ciento de su capacidad total, mientras que, en la Falcón, ubicada en ciudad Guerrero, Tamaulipas, es el 18 por ciento, sin embargo, ello no representa un riesgo para las poblaciones fronterizas que dependen de ellas. 

Agustín Boone Flores, responsable de CILA en esta ciudad comentó que el nivel del río Bravo en su parte ubicada entre los dos puentes internacionales es en este momento de solo 40 centímetros, la mitad de su nivel habitual. 

“Hubo un cambio de extracción de la presa La Amistad, anteriormente se estaban extrayendo 23 metros cúbicos por segundo, al día de hoy se están extrayendo 18 metros cúbicos por segundo que es el cambio de fracción, esto ocasiona el bajo nivel del agua en el río y es lo que se ve pactado en el área de los dos Laredos”, expresó. 

Explicó que hace una semana el nivel en el punto de monitoreo oscilaba alrededor de los 60 centímetros y en estos días descendió a los 40 centímetros y es debido al cambio de fracción que se presentó en la presa La Amistad. 

Ante el bajo nivel en el río, el responsable de CILA exhortó a la población para que administre su consumo ante el bajo nivel de agua en el afluente, que dejó al descubierto algunas de las bocatomas que toman el agua para abastecer a la población. 

“En la presa de la Amistad tenemos agua suficiente para la población, pero si pedimos que sigan las recomendaciones que está haciendo la Comisión Municipal de Agua Potable en la ciudad sobre el cuidado del agua, es importante que la población verifique que no haya fugas en sus instalaciones, también les pedimos que eviten regar la calle, plantas o lavar los carros, es de suma importancia que haya un uso racional del vital líquido”, aseguró. 

Boone Flores agregó que, en cuanto a la disponibilidad del agua, está garantizada por un buen tiempo para las ciudades fronterizas, y no hay motivo de alerta como para que la ciudad se quede sin agua, pero hay que cuidarla porque las presas se encuentran con bajos niveles.