Después de un año, el sismo continúa

Este viernes se cumple un año del sismo más fuertes registrado en los últimos tiempos, con una magnitud de 8,2 grados el cual dejó más de 50 mil afectados y cobró la vida de 102 víctimas, con el cual la zona del Istmo de Tehuantepec quedó devastada. Un año después, aun no se concluyen los trabajos de reconstrucción.

A pesar de que las autoridades Federales y Gubernamentales empeñaron su palabra para regresar la paz y reconstruir las zonas afectadas, aun no ha sucedido debido a la falta voluntad institucional.

Después del 7 de septiembre, el gobierno mexicano repartió entre los damnificados del sur de México tarjetas en las que se depositó dinero para la compra de materiales de construcción. Sin embargo esta ayuda no ha sido suficiente para quienes sufrieron daños graves o pérdida total de sus viviendas.

Los datos de un censo realizado tras el terremoto muestran que al menos 7300 viviendas fueron pérdida total y 7600 sufrieron daño parcial. En el primer caso, a los propietarios les prometieron 120.000 pesos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y a los segundos, 15.000 a través de unas tarjetas bancarias, sin embargo la situación aún no ha sido resuelta.

Debido al retraso en los pagos de las constructoras, los habitantes afectados han optado por la autoconstrucción de sus viviendas ya que es la única solución por el momento. De los 73 centros educativos que resultaron dañados por el terremoto, solamente uno ha sido reconstruido, la Escuela de Juchitán, el cual no es suficiente para cubrir la demanda educativa de la región.

Tras el terremoto de hace un año, muchos de los afectados se han marchado y otros han sufrido depresiones y trastornos psicológicos ligados a la tragedia, es por eso que el sentir general de la población es que el sismo aún no termina.