ELECCIÓN RIESGOSA
Opinión / Columna
Publicado: 21 de mayo, 2018 | 1:04 PM
La elección a la presidencia de la republica está tomando matices tan dramáticos que debiéramos iniciar a preocuparnos, porque está pasando límites tolerables y dejando ya a un lado el calificativo de "ejercicio democrático".
Evidentemente no es lo mismo que el 2000, o el 2006, y está muy lejos de parecerse al 2012. En este año, el factor redes sociales ha tenido una intervención trascendental, por un lado buena, porque ha logrado meter al proceso a millones de habitantes que antes no se interesaban, pero también mala porque ha provocado enfrentamientos y divisiones por la muy alta difusión de informes ( falsos y verdaderos), "memes", encuestas ( falsas y verdaderas) , y de toda clase de publicaciones ( muchas reales, muchas "fake news").
Deben ser los candidatos principalmente, pero también los partidos y coaliciones, quienes busquen ya, y más en la parte final de la campaña, un camino para evitar que la polarización nos lleve a terrenos peligrosos que incluso puedan poner en riesgo la estabilidad del país.
En medio de la vorágine informativa y de la lucha descarnada por el poder, tal parece que a nadie se le ha ocurrido proponer un pacto o algo parecido, en el que se comprometan a moderar los ataques, a bajarle a las ofensas y sobre todo, a respetar los resultados del uno de Julio.
De alguno de los candidatos, o de los cuatro, debe salir un "mea culpa" aceptando que a México no le hace nada bien como país el nivel de denotación, ni los ataques directos y hasta ofensivos en los spots de radio y televisión, así como los discursos cargados de encono.
Aquella que digan que "esto es una campaña y en campaña de vale de todo", están equivocados. En 2018 este país es otro, y no se pueden hacer campañas como en anteriores ocasiones, pues nos hacemos daño.
Hoy, nadie puede negar que tel este ambiente político ha generado un ambiente de odio y enfrentamiento entre millones de mexicanos, que va más allá de lo normal. Y ello es riesgoso.
Hay focos rojos encendidos. Hay una señal que advierte sobre la peligrosa polarización de la sociedad provocada por la el encono y la confrontación mal entendida.
Si esto no se detiene y seguimos en el mismo tono, con los anti Lopezobradoristas enviando por redes y medios toda clase ataques, y estos respondiendo furibundos, con los Anayistas insultando y los priistas peleando, esto se convierte en un caldo de cultivo sumamente peligroso.
A unas cuantas semanas de la elección más importante en la historia moderna de nuestro país, tensar a la sociedad es irresponsable.
A las elecciones, debiéramos verlas como lo que son, ejercicios democráticos que permiten encontrar vías de salida a nuestros problemas, y no como rutas que nos conduzcan a callejones sin salida de violencia e intolerancia.
No pasemos por alto que casi 100 candidatos y políticos han sido asesinados desde septiembre a la fecha.
Hace unos días el Ombudsman nacional, Luis Raúl González Pérez, en su informe de labores dijo que los procesos electorales no deberían llevar al país a la violencia, la intolerancia y la división.
Tiene razón.
Y más cuando agrega que "México no puede sucumbir en la coyuntura de ningún proceso electoral, mucho menos sumirse en la contemplación pasiva de la violencia y la impunidad".
¿Se atreverá algún candidato, o mejor dicho, se atreverán los candidatos a hacer un llamado a la paz, a la reconciliación y a la aceptación de los resultados?