Reynosa se prepara para atender a deportados

La alcaldesa Maki Ortiz Domínguez declaró que una de las medidas concretas que pudiesen tomarse en el municipio para enfrentar el aumento en el número de personas deportadas a través de esta ciudad fronteriza a partir de la toma de posesión de Donald Trump, sería la implementación de una oficina con módulos de los países de Centroamérica “para que se pudieran hacer cargo todos los países de sus connacionales”.

Con esta medida no se buscaría deslindarse del apoyo que se ha brindado hasta el momento a esta población proveniente del llamado Triángulo del Norte conformado por Honduras, El Salvador y Guatemala que representan casi el total de deportados extranjeros que llegan a Reynosa, sino trabajar en coordinación con estas naciones para brindar una mejor atención pues no se cuenta con los recursos suficientes para dar atención a todos los mexicanos y extranjeros que puedan arribar en un futuro cercano.

Comentó que esto es algo sobre lo que se debe trabajar de manera inmediata ya que se han visto los efectos desde el año pasado del aumento en el flujo de migrantes, poniendo como ejemplo la sobrepoblación que padeció el CAMEF durante el mes de noviembre.

“Como mexicanos nos haremos cargo de toda la repatriación de nuestros connacionales tratándolos con dignidad, por supuesto a los demás países, también pero si queremos hacer de manifiesto que existe una repatriación informal, una repatriación que viene masiva sin que venga a través del Instituto Nacional de Migración sino que nada más cruza de Estados Unidos a México y que a nosotros nos llega pero la capacidad de la ciudad es limitada”.