Seguía viva después de pasar varias horas en el refrigerador de una morgue

Mientras un grupo de forenses llenaban formularios de diferentes cuerpos que habían sido víctimas de un accidente automovilístico, uno de los trabajadores se percató que una mujer sudafricana aún seguía con vida.

El trabajador sacó un cuerpo de la cámara mortuoria y quedó impactado cuando notó que estaba respirando de forma muy débil.

Luego de superar el impacto, los forenses trasladaron de inmediato a la mujer para que fuera atendida, ella ahora está luchando por su vida.

“Nunca esperas abrir una nevera y encontrar a alguien allí con vida. ¿Puedes imaginarte si hubiéramos comenzado la autopsia y la hubiéramos matado?”, se preguntó uno de los forenses que atendieron a la mujer.

El terrible accidente en una carretera cerca de Johannesburgo dejó varios heridos y según equipos de emergencia tres personas muertas en la escena.

Según los trabajadores forenses ellos sólo reciben los cuerpos y no determinan la muerte de una persona.

Por su parte, el servicio de paramédicos hizo sus descargos asegurando que los equipos “no evidenciaron signos de vida”, lo que se sumó a que la mujer tenía lesiones tan severas en su cabeza que ni siquiera se pudo hacer una estimación de su edad.

Además, el gerente de operaciones de Distress Alert, quienes respondieron al llamado de emergencia, aseguró que no hubo “negligencia” y reconoció que lo sucedido es "una de las peores cosas" que le podía pasar a un paramédico.