Triste día del albañil

Cada tres de mayo se celebra en México el día del albañil, la raza obrera suspende labores al medio día, para festejar y agradecer por el trabajo.

Sin embargo, hay quienes a pesar de años de esfuerzo y dedicación a ésta noble labor, hoy no tienen un motivo para celebrar y por el contrario, pasan todo el día esperando una oportunidad para llevar el sustento a casa.

Tal es el caso de don Alfredo Martínez, quién toda su vida se ha dedicado a la albañilería y considera que el trabajo hoy en día es menos reconocido y "la raya" cada vez alcanza para menos.

"Más que nada en el salario, por que quien no querría un salario bien remunerado" "Eso ya no es salario, es un salario obsoleto ya que no sirve por que todo está caro" comentó.

Además de la poca paga y las condiciones climáticas, tienen que soportar a los encargados de obra, que muchas veces se aprovechan de su posición para abusar de los trabajadores, que sólo buscan llevar el sustento a sus familias.

Aún así es un claro ejemplo de lealtad y perseverancia al acudir día con día, así cómo sus compañeros, a las instalaciones del Sindicato Único de albañiles, donde aguardan a la intemperie esperando se les tome en cuenta.

Es a través de este medio, que solicitan a constructores y autoridades de Gobierno, eviten traer trabajadores de otras ciudades para la obra pública y garanticen así el trabajo para los albañiles locales.